Clínicamente, se considera que se ha producido la menopausia cuando han pasado más de 12 meses seguidos desde la última menstruación; generalmente ocurre entre los 45 y 55 años y suele acompañarse de síntomas como sofocaciones y otros; marca el fin del ciclo menstrual de la mujer. Si has sangrado después de este periodo, es importante saber que no es normal y podría señalar un problema de salud subyacente que necesita atención médica.
En este artículo, te explicamos qué puede estar causando este sangrado, cuáles son las opciones de tratamiento disponibles y medidas preventivas.
Causas comunes de sangrado postmenopáusico
El sangrado después de la menopausia puede tener diversas causas, entre las cuales se incluyen:
- Atrofia endometrial: la disminución de estrógenos puede adelgazar el revestimiento del útero y provocar que sangres. Se trata de la causa más frecuente.
- Pólipos uterinos: crecimientos benignos en el revestimiento del útero que pueden provocar que sangres.
- Hiperplasia endometrial: engrosamiento del revestimiento uterino, a menudo debido a un exceso de estrógenos sin suficiente progesterona.
- Cáncer de cuello uterino o endometrio: si bien es menos común, el sangrado postmenopáusico puede ser un síntoma de cáncer.
- Sequedad vaginal: la reducción de la lubricación natural puede provocar irritación y sangrado.
- Medicamentos: algunos tratamientos hormonales, como la terapia de reemplazo hormonal, pueden tener el sangrado como efecto secundario.
- Alteraciones hormonales: desequilibrios en los niveles de estrógeno y progesterona pueden causar sangrado irregular.
- Infección uterina: puede ser una causa de sangrado postmenopáusico.
- Lesiones: daños físicos en la vulva, la vagina, en las vías urinarias o el recto.
- Enfermedades de transmisión sexual (ETS): en muy pocas ocasiones algunas ETS, como la gonorrea o la clamidia, pueden causar sangrado.
- Alteraciones en la coagulación u otras enfermedades generales.
Evaluación médica y diagnóstico
Primero de todo, en el caso de que experimentes un sangrado después de la menopausia, es fundamental que pidas cita para que podamos realizar un examen médico completo.
Esto nos permitirá entender mejor tu situación y determinar las pruebas necesarias para un diagnóstico preciso. Estas pueden incluir:
- Historial clínico y examen físico: revisaremos tu historial médico y llevaremos a cabo un examen físico para buscar signos de posibles causas del sangrado.
- Ecografía transvaginal: este procedimiento nos permite visualizar el interior del útero y evaluar el grosor del endometrio.
- Biopsia endometrial: en algunos casos, podemos tomar una muestra del tejido endometrial para descartar cáncer u otras anomalías.
- Histeroscopia: una técnica que permite observar directamente el interior del útero utilizando una cámara diminuta.
Opciones de tratamiento
Una vez que hayamos identificado la causa del sangrado y considerando tu historial médico y situación personal, se pueden llevar a cabo diferentes tratamientos:
- Terapia hormonal: en casos de atrofia endometrial, el uso de estrógenos locales puede ser beneficioso no solo para tratar el sagrado, sino también para mejorar los síntomas postmenopáusicos.
- Medicamentos: sobre todo en caso de enfermedades generales.
- Tratamientos mínimamente invasivos: como la laparoscopia, para eliminar los quistes ováricos o reparar el prolapso uterino que pueden ser la causa del sangrado.
- Procedimientos quirúrgicos: algunos casos de pólipos e hiperplasia pueden requerir intervención quirúrgica para su eliminación, o en situaciones muy específicas, una histerectomía.
- Tratamiento oncológico: en caso de diagnóstico de cáncer, se seguirá un plan de tratamiento específico que puede incluir cirugía, radioterapia o quimioterapia.
Prevención y monitoreo
Aunque no siempre se puede prevenir, las revisiones ginecológicas periódicas son esenciales para detectar cualquier problema a tiempo. Mantener un estilo de vida saludable y estar informada sobre los síntomas te ayudará a gestionar mejor tu salud ginecológica.
Cuándo buscar ayuda médica
Es fundamental que busques atención médica inmediata si experimentas sangrado después de la menopausia. Aunque la gran mayoría de veces las causas son benignas, es importante obtener un diagnóstico preciso y tratamiento adecuado.
No dudes en pedir cita si notas cualquier tipo de sangrado, ya sea leve o abundante. En WOMEN’S te guiaremos y cuidaremos tu salud ginecológica de manera efectiva.