Autor:
Director Científico de Women’s.
Autora:
Experta en endometriosis y en ecografía ginecológica.
En 2012, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 6 de febrero como el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, con el objetivo de promover la eliminación de una práctica milenaria que sufren millones de mujeres tanto en África, Asia y América latina, como en poblaciones emigrantes que viven en Europa, Norte América y Oceanía.
En España viven más de 70.000 mujeres (18.000 de ellas niñas menores de edad) originarias de países donde la mutilación genital femenina es una práctica frecuente y socialmente aceptada.
La mutilación parcial o total de los genitales externos de la mujer por razones sociales y no terapéuticas es una violación de los derechos humanos de las mujeres y las niñas. Pero, en la mayoría de los casos, tanto las personas que fomentan y practican la mutilación genital, como las familias de las víctimas no son conscientes el daño extremo que a lo largo de toda la vida causará la mutilación a las mujeres que la padecen.
La mutilación genital es una práctica dolorosa con consecuencias muy graves para la salud física y psicológica de la mujer: puede causar mucho dolor y hemorragias graves, y sus secuelas pueden persistir en el tiempo y producir esterilidad o infertilidad, problemas urinarios, infecciones, complicaciones en el parto (como esguinces o fístulas), y muerte de los recién nacidos y de las madres.
CIRCUITO PARA LA RECONSTRUCCIÓN GENITAL A LAS MUJERES RESIDENTES EN CATALUÑA.
El Departamento de Salud de la Generalitat creó en el año 2015 el circuito de la sanidad pública para detectar y tratar casos de ablación, así como para la reconstrucción del clítoris a las mujeres residentes en Cataluña que han sufrido mutilación genital femenina.
Desde 2014, el doctor Francisco Carmona, Jefe de Servicio de Ginecología del Hospital Clínic de Barcelona, y su equipo, conscientes del impacto que la mutilación genital femenina tenía en la salud y el bienestar de muchas mujeres en nuestro país, crearon en el Hospital Clínic un circuito con formadores de la zona, psicólogos, médicos y ginecólogos para detectar y tratar a las mujeres que en la infancia han sufrido mutilación genital y para dar a conocer la unidad y la posibilidad de operarse.
Desde entonces, elHospital Clínicde Barcelona ha realizado más de30 operaciones de reconstrucción de clítoris a mujeres víctimas de ablación.
Las afectadas pueden solicitar la operación, que es relativamente sencilla, dura unos 30-40 minutos y solo requiere, como máximo, 24 horas de hospitalización, en el Centro de Atención Primaria (CAP) que les corresponda.
CUATRO TIPOS DE MUTILACIÓN GENITAL FEMENINA.
Se considera mutilación genital femenina a la eliminación parcial o total del tejido de los órganos genitales femeninos por razones no médicas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala cuatro tipos de mutilación genital, según el nivel de lesión provocado.
- Tipo I (clitoridectomía): extirpación parcial del clítoris.
- Tipo II (excisión): extirpación del clítoris, extirpación de los labios menores y, en algunos casos, extirpación de los labios mayores.
- Tipo III (infibulación): estrechamiento vaginal, mediante la sección y recolocación de los labios menores y mayores.
- Tipo IV: otras mutilación de los genitales femeninos, como la cauterización, el raspado, la incisión o la perforación.
CÓMO ACABAR CON LA MUTILACIÓN GENITAL FEMENINA.
Para erradicar la mutilación genital femenina es imprescindible proporcionar información de calidad a las personas implicadas, porque, muy a menudo, no solo no son conscientes de las nefastas consecuencias que la mutilación tiene para la salud de niñas y mujeres, sino que creen que es positivo e imprescindible para la adecuada integración de la mujer en la sociedad.
Es fundamental que las familias conozcan los beneficios que para la salud de la mujer y de sus hijos tiene el abandono de esta práctica y que sepan que no están solas.
Desde 2015, España cuenta con un protocolo de prevención de la mutilación, incluido un documento, el Compromiso Preventivo, que se ha comprobado que resulta muy efectiva para evitar la mutilación.
En sus viajes a sus países de origen, la familia de las niñas pueden utilizar dicho documento, firmado por el pediatra o médico del centro de salud, con el que se certifica que las niñas no han sido mutiladas y que los padres se comprometen a no someterlas a la ablación, para matenerse firmes en su decisión de no favorecer que sus hijas sean sometidas a una mutilación genital.