La Inseminación artificial (IA) y la fecundación in vitro (FIV) son dos técnicas de reproducción asistida que tienen como objetivo aumentar las posibilidades de conseguir un embarazo deseado.
La principal diferencia entre la IA y la FIV radica en dónde se produce la unión del óvulo y el espermatozoide y en cómo se lleva a cabo el proceso.
En la inseminación artificial, el esperma se procesa en un laboratorio con la finalidad de mejorar la calidad de los espermatozoides. Cuando llega el momento, los espermatozoides son introducidos directamente en el útero de la mujer durante su período fértil. De este modo, la unión del óvulo y el espermatozoide puede ocurrir de manera natural en el cuerpo de la mujer.
En la fecundación in vitro, los óvulos se extraen de los ovarios de la mujer y se combinan en el laboratorio con espermatozoides previamente seleccionados, ya sea de la pareja o de un donante. A continuación, el embrión o embriones seleccionados son transferidos al útero para la implantación y desarrollo del embarazo.
Ambas técnicas pueden ser recomendables y oportunas según sean tus circunstancias médicas y tus preferencias personales. Si deseas más información o una segunda opinión especializada, pide una primera cita de fertilidad gratuita, presencial en Barcelona o por videoconferencia y resolveremos tus dudas.
¿Qué es la Inseminación Artificial?
La inseminación artificial (IA) es una técnica de reproducción asistida relativamente sencilla y rápida. Consiste en depositar esperma concentrado (espermatozoides seleccionados de la pareja o de donante) en el interior del útero cuando el ovario está cerca de liberar uno o más óvulos.
Para llevar a cabo la IA, se utiliza una sonda o tubo delgado y flexible que se inserta a través del cuello del útero, se coloca en la cavidad uterina y, a través de él, se liberan los espermatozoides seleccionados.
De este modo, disminuimos la distancia entre el óvulo y los espermatozoides, facilitamos la fecundación y aumentamos las probabilidades de embarazo.
La inseminación la realizamos en la consulta ginecológica, es indolora, no precisa anestesia y, una vez concluido el procedimiento, puedes reposar unos minutos en la consulta y, a continuación, hacer vida normal.
Ventajas y desventajas de la inseminación artificial (IA)
Las ventajas y las desventajas de la inseminación artificial pueden variar según sea la situación médica, la salud reproductiva individual y las preferencias personales de cada mujer o de cada pareja.
Una de las principales ventajas de la inseminación artificial (IA) es que es menos compleja, menos invasiva y generalmente implica menos procedimientos médicos, comparada con otros tratamientos de reproducción asistida como la fecundación in vitro (FIV).
La IA es la técnica de fertilidad más similar a la concepción natural, dado que la fecundación se produce dentro del cuerpo de la mujer, a diferencia de la FIV, en la que los óvulos se fecundan en el laboratorio.
Otra de las ventajas de la IA es que puede llevarse a cabo en la consulta ginecológica mediante una técnica sencilla, cómoda e indolora que no requiere anestesia ni estancia hospitalaria o reposo prolongado.
La IA es una técnica de fertilidad muy utilizada y puede ser la primera opción de reproducción asistida en mujeres jóvenes (< 35 años de edad) que tienen poco tiempo de búsqueda de embarazo (entre seis meses y un año) y la calidad de semen de la pareja ligeramente alterada.
Suele estar indicada en aquellas mujeres que desean maternidad solas y precisan donante de semen.
En cuanto a sus desventajas, la IA no es una técnica apropiada para todas las mujeres o las parejas que acuden a una clínica de fertilidad. La IA depende de que haya suficientes óvulos de buena calidad y un ambiente uterino adecuado para el embarazo, por lo que no es efectiva en todos los casos.
Una vez analizadas las circunstancias, el ginecólogo especializado en reproducción asistida y fertilidad estará en disposición de aconsejarte sobre las opciones específicas más adecuadas para ti.
¿Qué es la fecundación in vitro?
La fecundación in vitro (FIV) es uno de los tratamientos de fertilidad más utilizados en reproducción asistida. El tratamiento consiste en unir los óvulos con los espermatozoides en el laboratorio y posteriormente transferir el embrión al útero materno para conseguir su implantación y lograr el embarazo.
Puede ser la opción más adecuada si existen problemas de fertilidad femeninos o masculinos, en mujeres con edades avanzadas y en parejas de mujeres que desean ser madres.
Concretamente, la FIV puede ser recomendable para:
- Mujeres con endometriosis.
- Mujeres con ovarios poliquísticos.
- Mujeres con óvulos de baja calidad (edad avanzada, baja reserva).
- Parejas que no han tenido éxito con tratamientos de fertilidad previos.
- Parejas en las que es preciso llevar a cabo un estudio genético preimplantacional.
- Parejas con esterilidad de origen desconocido.
- Mujeres con edad avanzada que desean vivir la maternidad de manera individual.
- Parejas de mujeres.
- Parejas en las que el hombre tiene alteraciones severas en cantidad o calidad del esperma.
La fecundación in vitro (FIV) con donación de óvulos es una técnica de reproducción asistida en la que una mujer recibe óvulos de una donante para llevar a cabo el proceso y lograr un embarazo. Los óvulos donados se fertilizan en el laboratorio con el esperma de la pareja de la receptora o con esperma del donante.
La FIV con donación de espermatozoides es una técnica de reproducción asistida en la que una pareja o una mujer utilizan esperma de un donante para llevar a cabo el proceso de FIV y lograr un embarazo.
La FIV con inyección intracitoplasmática de espermatozoides es una forma avanzada de FIV en la que se selecciona con el microscopio un solo espermatozoide y se introduce directamente en un óvulo en el laboratorio de fecundación in vitro. Esta técnica ayuda al proceso de fecundación del óvulo, asegurando que el espermatozoide entre dentro del óvulo.
Ventajas y desventajas de fecundación in vitro (FIV)
La fecundación in vitro (FIV) puede tener ventajas y desventajas en relación con otras técnicas de reproducción asistida. Por ello es esencial que cuando se elige una u otra técnica de fertilidad, se haga considerando las circunstancias individuales de cada persona o de cada pareja.
Cada situación es única y, por tanto, para optar por uno u otro procedimiento de reproducción asistida deben tenerse en cuenta la edad, la reserva ovárica, la calidad del semen, las posibles patologías de base y las preferencias personales de la mujer o de la pareja.
Una de las principales ventajas de la FIV es que puede ser efectiva para parejas con problemas de fertilidad, como obstrucciones en las trompas de Falopio, endometriosis, problemas ovulatorios o anomalías en el esperma.
Además, la FIV facilita el control de riesgos genéticos mediante el diagnóstico genético preimplantacional (DGP), que es una técnica de reproducción asistida que se utiliza para detectar anomalías genéticas o cromosómicas en embriones antes de su implantación en el útero materno.
La finalidad del DGP es ayudar a las parejas que tienen un alto riesgo de transmitir enfermedades genéticas a su descendencia o que han experimentado repetidos abortos espontáneos o ciclos fallidos de fecundación in vitro previos.
Las desventajas asociadas con la FIV son limitadas. Existe riesgo de complicaciones relacionadas con la estimulación ovárica, la punción folicular y la transferencia embrionaria y el embarazo, pero son escasas e infrecuentes.
Diferencias entre fecundación in vitro (FIV) e inseminación artificial (IA)
Tanto la inseminación artificial (IA) como la fecundación in vitro (FIV) son dos técnicas de fertilidad que comparten el objetivo de aumentar las posibilidades de conseguir un embarazo, pero cada una de estas dos técnicas tiene sus propias indicaciones, procesos y resultados potenciales.
La elección entre la inseminación artificial y la fecundación in vitro depende de varios factores. La causa de la infertilidad, la edad de ambos miembros de la pareja, el historial médico y de fertilidad de la mujer o de la pareja, además de las preferencias personales pueden influir en la elección del procedimiento.
Las diferencias más significativas entre la fecundación in vitro y la inseminación artificial son:
Proceso de fertilización
- Fecundación in vitro (FIV)
La fecundación in vitro implica la fertilización de los óvulos por los espermatozoides en un laboratorio. Los óvulos y el esperma se combinan en un ambiente controlado y, una vez fecundados, se transfieren embriones al útero.
- Inseminación artificial (IA)
En la inseminación artificial, el esperma (ya sea de la pareja o de un donante) se deja directamente en el interior del útero durante su ventana de fertilidad (en el momento de la ovulación) para aumentar las posibilidades de fecundación del óvulo por los espermatozoides.
Dónde se produce la fertilización
- Fecundación in vitro (FIV)
En la FIV, los óvulos se extraen de los ovarios de la mujer y se combinan en el laboratorio con espermatozoides previamente seleccionados, ya sea de la pareja o de un donante. A continuación, el embrión o embriones seleccionados son transferidos al útero para la implantación y desarrollo del embarazo.
- Inseminación artificial (IA)
Una vez procesados en un laboratorio con la finalidad de mejorar su calidad, los espermatozoides son introducidos directamente en el útero durante el período fértil. De este modo, la unión del óvulo y el espermatozoide puede ocurrir de manera natural en el cuerpo de la mujer.
Indicaciones de cada técnica
- Fecundación in vitro (FIV)
Se utiliza en casos de infertilidad más complejos, como obstrucciones en las trompas de Falopio, endometriosis severa, problemas ovulatorios o anomalías en el esperma, así como en casos donde la IA no ha tenido éxito.
- Inseminación artificial (IA)
La inseminación artificial suele ser utilizada en casos de infertilidad leve o inexplicada, problemas con el moco cervical, factores masculinos leves de infertilidad o cuando se requiere la ayuda de un donante de esperma.
Diferencias en cuanto a complejidad
- Fecundación in vitro (FIV)
La FIV es un procedimiento más complejo. Requiere la extracción de óvulos mediante una cirugía, fertilización en laboratorio y posterior transferencia de embriones al útero.
- Inseminación artificial (IA)
La inseminación artificial es menos invasiva y generalmente implica menos procedimientos médicos, con el proceso centrado en la introducción del esperma en el útero.
Diferencias en las tasas de éxito
- La FIV puede tener tasas de éxito más altas en comparación con la IA, especialmente en ciertos casos de infertilidad. Las tasas de éxito pueden variar según la causa de la infertilidad, la salud reproductiva individual y otros factores, como la edad de la mujer.
¿Es más caro la fecundación in vitro o la inseminación artificial? Diferencias de precio
Por lo general, el precio de la fecundación in vitro (FIV) tiende a ser más alto que el de la inseminación artificial (IA). Sin embargo, es necesario que tengamos en cuenta que el coste de un tratamiento de reproducción asistida puede variar significativamente según la complejidad del tratamiento, las necesidades individuales o de pareja, y de si se han de llevar a cabo pruebas y análisis adicionales.
En Women’s, la primera visita de fertilidad es gratuita, presencial o telemática, y puedes acceder a un tratamiento de reproducción asistida a partir de 1500 euros.
Si deseas iniciar un tratamiento de fertilidad o te interesa una segunda opinión sobre tu situación personal, pide cita y aclararemos todas tus dudas.
Atendemos desde Barcelona a mujeres de toda España y de otros países que desean quedarse embarazadas. Estamos acreditados por el Ministerio de Sanidad y por la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) y disponemos del Sello de Calidad y el Diploma Certificado de Participación en el Registro Nacional de Actividad – Registro SEF, garantía de calidad asistencial, excelencia y seguridad de un centro con actividad en Reproducción Humana y Fertilidad.